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Iglesia de la Compañía de Jesús (Segovia)
Iglesia de la Compañía de Jesús (Segovia)
La iglesia de la Compañía de Jesús, está situada en el conjunto urbano histórico del "Barrio de los Caballeros" de la ciudad de Segovia. La manzana en que se sitúa el edificio se encuentra en la parte del recinto que se extiende entre el eje vertebrador de Juan Bravo y el arco que forman al este el acueducto y al norte la muralla, hacia el Clamores, conjunto que ha sido denominado como Barrio de los Caballeros
características generales
Se trata de una típica muestra barroca de iglesia jesuítica. La impresionante y adusta fachada de la iglesia, toda ella de granito, ofrece un claro aspecto herreriano; en ella se destaca un cuerpo central superior en altura a los laterales, a los que se une por medio de dos grandes aletones de traza simple con un pequeño perfil retranqueado; la parte superior se remata, sobre ventana rectangular con frontón, con otro triangular y decoración de las típicas bolas herrerianas.
En el piso inferior de la fachada resalta el cuerpo central, con puerta de mayor tamaño y decoración que las laterales. Ésta, con decoración heráldica a los lados, ofrece un modelo adintelado sobre pilastras dóricas muy sencillas, friso de triglifos y metopas y remate en frontón curvo partido en su mitad por un motivo heráldico rematado a su vez por un pináculo con bolas.
Se trata de una hermosa iglesia de tres naves separadas por pilastras con capiteles corintios y rico entablamento, con cúpula en el crucero, cabecera plana y coro alto a los pies con una antiestética vidriera.
Destaca también el patio, de tres pisos con vanos rodeados de marcos quebrados, sobrio en su estilo barroco de raigambre borrominesca, atribuido a Juan de Mugaguren.
Autoría y desarrollo de las obras
Los motivos heráldicos de la fachada fueron labrados por los canteros Bias de Reoyo, Gerónimo de Peñalva y Juan Marchante, bajo la dirección del maestro vizcaíno San Juan de Gogorza, quien en 1589 había contratado la construcción de la iglesia.
Fallecido éste al año siguiente, continuó las obras Diego de Matienzo, a la sazón maestro de cantería de las obras del Rey, según traza y dirección del hermano Andrés Ruiz.
Poco después, en 1594, le sucede en la dirección su yerno Diego de Sisniega, quien por entonces trabajaba también en las capillas de la girola de la Catedral. En esa fecha estaba ya construido el crucero, parte de las capillas y casi toda la fachada.
En 1603 consta la presencia de los arquitectos Pedro de Brizuela y Pedro de la Vega en la construcción de una escalera y el claustro; el primero trabajó también en la iglesia, en donde la decoración geométrica de la bóveda de cañón o los vanos termales en los lunetas son un reflejo más del conocimiento por parte de Brizuela de los tratadistas italianos cuyas obras se comenzaban a difundir (Vignola, Palladio, Serlio).
La capilla mayor es obra de Francisco Gutiérrez de la Cotera fechada en 1641. Las obras finalizaron en 1645.
Historia e intervenciones
Tras la expulsión de los Jesuitas en 1768 el edificio se transformó en Seminario Conciliar, agregándosele poco después (1781) el antiguo Colegio de Teólogos de San IIdefonso.
En 1959 se alteró profundamente con la edificación de un disparatado bloque junto a él.
Referencias
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