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Yacimiento arqueológico de Malia
Mapa de los enclaves arqueológicos de Creta.
El yacimiento arqueológico de Malia se encuentra situado en la actual ciudad de Malia, en la costa septentrional de la isla de Creta, próximo al mar, donde las montañas de Lasithi dan paso a una fértil llanura. Los restos que hoy en día se pueden ver se corresponden con las últimas reconstrucciones que se hicieron hacia el 1450 a. C.[1] Anteriormente a estas fechas se han hallado vestigios de un asentamiento de época Neolítica, así como una continuidad en el periodo prepalacial y protopalacial o Primeros Palacios (2100-1600 a. C.).[1] La construcción del primer palacio tuvo lugar hacia el 2100-1900 a. C. pero fue destruido y abandonado en torno al 1700 a. C. Se han establecido diversas hipótesis: ¿un terremoto o desórdenes internos?.
Las primeras excavaciones se realizaron en 1915 por Iosif Hatzidakis,[2] con continuidad en la actualidad por la Escuela de Arqueología Francesa de Atenas.
La ciudad[editar]
Restos arqueológicos del Barrio Mu. 
Base de las construcciones.
El asentamiento urbano de Mallia comprende unos 7000 metros cuadrados y se extiende desde el palacio hasta la zona portuaria situada en el suroeste. Toda la ciudad está amurallada, aunque la cronología de ésta es ciertamente imprecisa. La zona mejor conocida y de la cual poseemos datos arqueológicos importantes es la que comprende el palacio y el denominado Barrio Mu.
Se han documentado una zona residencial que estaría recorrida por una red viaria de calles, bien enlosadas y ciudades, así como desagües que discurren bajo tierra.
Barrio Mu[editar]
Es la zona residencial. En ella se han encontrado diversos edificios destinados a diversos oficios así como de carácter habitacional; y espacios abiertos de carácter público que se han identificado como protoágoras.[3]
Destacan dos construcciones que se han denominado:
- Edificio A: construido en dos fases distintas posee forma trapezoidal y ocupa un espacio de 840 metros cuadrados. Está constituido por salas de representación, almacenes además de documentarse algunos depósitos de textos con escritura jeroglífica en lineal B.[4]
- Edificio B: más pequeño que el anterior, 500 metros cuadrados, en los que se hallaron diversos objetos de representación como dos grandes anclas de piedra y cerámica. Se encuentra asociado a los talleres cercanos de sellos, cerámica y fundición. Al igual que el anterior también posee almacenes y documentos en escritura jeroglífica el lineal B.[4]
Próximo al Barrio Mu se hallan la cripta y el mal llamado "ágora". La primera es una construcción subterránea de planta rectangular asociada a un espacio abierto con un pequeño graderío. Su funcionalidad no está clara, una hipótesis apunta a que fuese la sede de un poder diferente al real que residiría en el palacio, otra afirma que estaría dedicado a la realización de ceremonias de carácter público. Finalmente, y la más aceptada es que se correspondiese con un santuario.
En cuanto al "ágora", al igual que la cripta, no hay una interpretación clara del mismo, podría estar destinado a fines político-civiles.
El palacio[editar]
Maqueta del palacio de Malia.
El palacio de Mallia, al igual que los documentados en Cnosos o Zakros, presenta unas características propias de éstos. Es una arquitectura monumental, realizada en piedra, a diferencia de las construcciones domésticas, que presenta una fachada tanto exterior como interior desigual, con entrantes y salientes. Esto es consecuencia de una edificación progresiva en torno a un patio central, es decir, según las necesidades de cada momento.[2] A pesar de todo ello se puede observar que existe una separación clara en diversas áreas: la oficial/residencial, de carácter público/privado.
La entrada al palacio se realizaba por la fachada sur, la cual conducía directamente al patio central. En esta misma zona sur encontramos almacenes tanto para artículos de lujo como para cereales, un santuario y tun taller. En la parte central se ha hallado un depósito fundacional consistente en una cista que contenía un vaso cerámico; almacenes, la cocina, la denominada "sala del leopardo" por hallarse en su interior un hacha de carácter sagrado con forma de leopardo, así como una daga y espada de bronce y un brazalete (también se la conoce como la sala del tesoro religioso) y el salón de audencias. En cuanto a la zona norte se encuentran las estancias más importantes del palacio: las dependencias refinadas y el megaron al que se abren los archivos y una sala lustral.
Referencias
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