Viviendas en Altonaer 4-14
El edificio de Viviendas en Altonaer 4-14 fue la contribución brasileña a la exposición Interbau de 1957 en Berlín, con un proyecto de Oscar Niemeyer influenciado por las ideas de Le Corbusier.
El edificio contiene 78 apartamentos en una pastilla rectangular de 72 metros de largo en dirección norte sur y ocho plantas que se apoya sobre siete soportes dobles en V que permiten vistas transversales en la planta baja del espacio verde circundante y el acceso a las entradas del edificio. Separada del edificio principal se sitúa en su lado este una pieza de sección triangular que aloja los ascensores y que se conecta únicamente a través de las plantas quinta y octava mediante unas pasarelas de 7 metros de longitud. Los apartamentos, a los que se accede a través de seis escaleras interiores y la torre del ascensor, atraviesan el edificio de este a oeste con las habitaciones orientadas a la cara este y los salas con logia y cocinas al oeste. Por razones de estabilidad, el edificio tiene una última planta con una cubierta de hormigón armado como "tapa"; esta planta solo recibe luz del día a través de rendijas estrechas.
El diseño original de Niemeyer tuvo que ser modificado para cumplir con los requisitos de vivienda social del gobierno de Berlín y el área comunitaria prevista inicialmente en la quinta planta tuvo que ser sustituida por seis apartamentos de 3 habitaciones accesibles por un pasillo con frente a la fachada oeste.
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