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Viguetas de Hormigón
Las Viguetas de Hormigón vienen prefabricadas y se clasifican de acuerdo a la forma de su sección en : viguetas autoportantes, pretensadas y semiresistentes.
Viguetas Autoportantes
Las secciones de estas viguetas son similares a las metálicas, en forma de I.
Son los extremos de las mismas que concentran las masas de la sección resistente, separadas por un alma más esbelta cuya función es unir los extremos.
La capacidad resistente de la pieza se expresa justamente en la forma de la sección.
Estas viguetas resisten su peso propio y el de las cargas que apoyan sobre ellas, y no requieren de apuntalamiento previo para su colocación. Son especialmente indicadas en la formación de forjados sanitarios, separados del suelo a una distancia aproximada a los 30 cm., pues otro tipo de viga perdería la madera del apuntalamiento en su construcción.
Viguetas Semirresistentes
Estas viguetas no tienen la cabeza de compresión como en el caso anterior.
Se ejecuta en obra por medio de hormigón de relleno y chapa de compresión.
Existen modelos donde se incorpora una armadura externa para mayor adherencia.
Estas viguetas no son capaces de resistir cargas por sí mismas, y algunos modelos no soportan ni su propio peso. Al carecer de cabeza de compresión, no son capaces de resistir tracciones ,efecto por flexión, por esta razón, requieren de apuntalamientos.
La ventaja que aporta esta vigueta es que los forjados construídos con ella resultan más monolíticos, porque el hormigón de relleno de senos y chapa de compresión efectuado de una sola vez en obra proporciona la cabeza de compresión para cada vigueta.
Este forjado presenta una sección donde los elementos resistentes tienen forma T, comportándose como una placa unidireccional y de gran monolitismo.
Con un conjunto de estas viguetas es posible construir jácenas planas o también las losas de escaleras.
Viguetas Pretensadas
Cuando la vigueta trabaja a los esfuerzos a que está sometida, adopta una flecha (deformación). Podría fabricarse una cuya deformación inicial contraria, llamada contraflecha, contrarreste los esfuerzos y, la deformación final, o flecha resultante, al entrar en carga será mucho menor. Éste es justamente el objetivo del pretensado.
El pretensado se realiza para aumentar la capacidad resistente a la compresión del hormigón. Al comprimir el hormigón de la vigueta, transcurrido un lapso de tiempo del fraguado, se libera la compresión; entonces la armadura inferior queda sometida a la tracción produciendo la contraflecha.
Tener en Cuenta
Se recomienda no almacenar Viguetas Pretensadas por un tiempo prolongado porque la deformación a que llegarían las vuelve inservibles.
En caso en que las viguetas posean una longitud mayor de la requerida, no debe reducirse su largo rompiendo las cabezas de las viguetas pues así estaría rompiendo los anclajes de la armadura pretensada perdiendo la contraflecha adquirida en ese pretensado.