Inscríbete y crea tu propia colección de obras y artículos
Palazzo Doria-Pamphili
El Palacio Doria, conocido en Roma como Palazzo Doria-Pamphili, es considerado la mansión particular habitada más importante de la ciudad. Este dato es especialmente reseñable pues casi todos los palacios de su época se emplean actualmente como sedes de organismos públicos y embajadas. Al contrario que ellos, el Palazzo Doria sigue siendo residencia de la familia nobiliaria del mismo nombre y alberga aún una fastuosa Colección privada de pintura y objetos decorativos, que es visitable en horario más o menos común al de los museos públicos romanos.
La saga de los Doria-Pamphili es el resultado de múltiples alianzas entre familias aristocráticas de toda Italia. Entre sus miembros más ilustres está el almirante Andrea Doria y el papa Inocencio X, popular en España por el retrato que le hizo Velázquez en 1649. Dicho retrato se conserva en el palacio y es su mayor joya.
El Palacio ocupa toda una manzana en el centro de Roma, cerca de la Via del Corso y no lejos de la Piazza Navona. La propiedad está gestionada por una fundación familiar que cuenta con página web.
Estancias del palacio
Las salas visitables se hallan en la planta principal. Por una puerta lateral de la planta baja se accede a una pequeña cafetería. Ya en el circuito del museo se halla una pequeña tienda con libros y demás objetos.
Entre las estancias más llamativas del palacio, destaca la Galería de los Espejos, de gusto barroco y que fue modelo a seguir para muchos palacios posteriores. El edificio cuenta con un patio central cuadrado, al que se asoma la Galería de los Espejos. Las restantes tres galerías que lo rodean están igualmente decoradas y albergan numerosas pinturas colgadas a varias alturas.
En otra sala, antaño empleada como salón de baile, se exhiben instrumentos musicales. Otra sala exhibe un trono, pues el palacio llegó a albergar fiestas de rango principesco. Durante la dominación napoleónica, el palacio fue empleado para fiestas en honor de los franceses.
Otra gran sala de doble altura alberga valiosas esculturas de época imperial romana, y otra (la primera que se visita) está consagrada a los paisajes del siglo XVII, al estilo de Poussin.