Inscríbete y crea tu propia colección de obras y artículos
Palau de la Música Catalana
El Palau de la Música Catalana es un auditorio de música situado en Barcelona, España. Fue proyectado por el arquitecto barcelonés Luis Doménech y Montaner, uno de los máximos representantes del Modernismo Catalán. La construcción se llevó a cabo entre los años 1905 y 1908. El edificio, sede central del "Orfeó Català", fue sufragado por industriales y financieros catalanes, ilustrados y amantes de la música, estamento que sesenta años antes ya había financiado el teatro de ópera y ballet Gran Teatre del Liceu.
Historia[editar]
Comienza con un encargo de un proyecto del Orfeó Català al arquitecto Luis Doménech y Montaner para construir un edificio destinado para ubicar su sede social. Este proyecto y su presupuesto correspondiente es aprobado por la asamblea el 31 de mayo de 1904. Antes de terminar el año se realiza la compra del claustro del convento de San Francisco, con la intendión de destinar este espacio para la construcción del edificio. En el año siguiente, concretamente el 23 de abril de 1905, se realiza el acto de colocación de la primera piedra de las obras, y para su financiación se emiten 6.000 obligaciones de cien pesetas.
Tres años más tarde, el 9 de Febrero de 1908, se celebra su inaguración. El auditorio fue destinado a conciertos de música orquestal e instrumental, así como a interpretaciones corales y a recitales de cantantes. Pero en el Palau han tenido también cabida actos culturales, políticos, obras teatrales y por supuesto las más variadas actuaciones musicales. En la actualidad sigue cumpliendo todas estas funciones, tanto en el ámbito de la música culta como en el de la música popular.
La acústica del auditorio es inmejorable. Los mejores intérpretes y batutas del mundo del último siglo (desde Richard Strauss hasta Daniel Barenboim, pasando por Ígor Stravinski y Arthur Rubinstein y los catalanes Pau Casals y Frederic Mompou) han desfilado ininterrumpidamente por el Palau, auténtico santuario de la música de Cataluña y al tiempo sala de conciertos de referencia en el panorama artístico internacional.
La arquitectura de Domènech es de gran calidad y originalidad. En el exterior se mezclan elementos escultóricos, que hacen alusión al mundo de la música, con elementos arquitectónicos y decorativos de carácter modernista y barroquizante. En el interior el arquitecto combinó magistralmente los diversos materiales de construcción con cerámica (el "trencadís" tan típico del Modernismo Catalán) y vidrio. La sala y el escenario forman un conjunto armónico, en el que uno se integra en el otro. El escenario está dominado en su parte trasera superior por los tubos del órgano, que se convierten a su vez en un elemento decorativo e icono del propio Palau. La embocadura del escenario está enmarcada por ilustraciones escultóricas espectaculares, sendas alegorías de la música culta y de la música popular: a la derecha, un busto de Ludwig van Beethoven sobre columnas dóricas que sostienen unos cúmulos de los que emerge la cabalgata de las walquirias (clara referencia a la adoración por Richard Wagner que siempre ha sentido el público catalán); a la izquierda, unos chicos al pie de un sauce en cuyas ramas aparece el busto de Josep Anselm Clavé, alusión al texto de la canción "Les flors de maig" de este autor.
El Palau de la Música Catalana fue declarado Monumento Nacional en 1971. Con tal motivo se realizaron amplias obras de restauración.
En 1997 la UNESCO incluyó el edificio en su relación del Patrimonio de la Humanidad.
El 9 de febrero de 2008 se cumplieron 100 años desde su inaguración.
Visitas[editar]
Existe la posibilidad de visitar su interior mediante visitas guiadas. Para realizar las visitas es imprescindible tener una entrada que se tiene que adquirir con al menos una semana de antelación. La visita incluye la Sala de concerts modernista y según la disponibilidad la Sala Lluis Millet i la Sala de música de cámara.
Referencias
Referencias e información de imágenes pulsando en ellas. |
Wikipedia, con licencia CC-by-sa |