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Josep Martorell
Josep Maria Martorell i Codina (Barcelona, 1925 - 28 de noviembre de 2017) es un arquitecto español que cursa sus estudios en la Escuela Superior de Arquitectura de esta ciudad, obteniendo el título en 1951, año en que se asocia profesionalmente con Oriol Bohigas, con el que es miembro fundador del Grupo R.
En 1961 obtiene el título de Técnico Diplomado en Urbanismo del Instituto de Estudios de Administración Local y, dos años más tarde, el de Doctor Arquitecto. En 1968 le nombran Presidente Delegado de la Comisión de Cultura del Colegio Oficial de Arquitectos de Cataluña y en 1979 Miembro de la Comisión Provincial de Urbanismo de Barcelona. Ha sido Miembro del Comité Ejecutivo del Congres d´Arquitectura de Catalunya 1980-81 y miembro de la Comisión del Patrimonio Arquitectónico de Barcelona. Ha obtenido el premio Fundación Güell por la labor investigadora de su libro Guía de arquitectura de Menorca, que le otorgó el instituto de Estudios Catalanes en 1978.
En 1954 crea el estudio de arquitectura MBM Arquitectes, junto con Oriol Bohigas y David Mackay.
A principio de los años 50, el Grupo R, fundado por Martorell y Bohigas, intentaba el renacimiento del Movimiento Moderno, pero pronto dieron cuenta que no era suficiente con recuperar las vanguardias anteriores a la Guerra Civil y limitarse a continuar la labor que había comenzado J.L.Sert y S.Illescas como si no hubiera pasado ni pasara nada. Así, la situación social, política y económica del país hacen que se reaccione ante el formalismo y el racionalismo, que se deriva de las ideas utópicas del movimiento moderno y que se reflejan en una arquitectura de composición abstracta, con muros lisos y blancos, volúmenes cúbicos, ausencia absoluta de decoración y rigidez estructural buscando crear un estilo anónimo e internacional que no tiene en cuenta el contexto donde se construye el edificio. La reacción del Grupo R y MBM es la de buscar una respuesta más realista y comprometida con las peculiaridades de una región especifica, en este caso España y, más concretamente Cataluña, pero con una mentalidad abierta influencias y técnicas exteriores, llegando a postular que la única manera de que el racionalismo, el funcionalismo y las grandes conquistas de los maestros de la arquitectura moderna ( Mies, Le Corbusier, Gropius y Wright) no caigan en un manierismo inútil es a través del nuevo realismo, que se opone al aspecto formal del racionalismo y que combina elementos heredados de la tradición constructiva catalana con modernos sistemas de construcción, lo que produce un choque entre el aspecto externo del edificio y la estructura del mismo. Esto es evidente en el complejo Crescent de Viladecans, 1973 y también se puede ver en la Casa del Pati en Ronda Guinardo, 1964. Pero MBM no dejará de usar la construcción modular y repetitiva, como queda patente en el edificio de Vía Augusta, del mismo año que la casa anterior. El uso de lenguajes expresivos, como el de la urbanización de Pallar, primer ensayo de vivienda barata que realizan, o el de las viviendas para profesores de la escuela San Jordi en Pineda de Mar demuestran la valoración que hacen, en esta época, del contenido lingüístico. En los dos ejemplos mencionados anteriormente se crea un lenguaje de gruesos muros, pilares de ladrillo y pequeños huecos que dan una sensación de construcción masiva. Recuerda al Nuevo Brutalismo británico en cuyas obras se muestran los elementos constructivos, los materiales e incluso las instalaciones técnicas de una forma sincera, sin recubrimientos. En estas obras se sintetiza el procedimiento tipológico y normativo del racionalismo y las referencias al clima y a la tradición artesanal de la región.
Referencias
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