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Grupo san Mauro (Alcoy)
Grupo san Mauro (Alcoy)
El grupo de viviendas san Mauro ocupa una manzana de la trama en el Ensanche de Alcoy que, aunque planificado en 1878 por el ingeniero industrial Enrique Vilaplana Juliá y el profesor Teodoro Balaciart Tormo, no se colmataría hasta avanzado el siglo XX.
La edificación consiste en cuatro bloques de planta baja y cuatro alturas agrupadas dos a dos dejando unos patios lineales entre ellos. Los testeros se resuelven como medianeras. En la calle interior Teodoro Llorente la sección se desarrolla con un ancho de calzada de 6 metros, una zona ajardinada de tres metros a ambos lados y aceras de 2 metros de pavimento.
Las galerías de sevicio y los balcones de los comedores se agrupan en bandas verticales que sobresalen de la línea de fachada, arrancando de la primera planta. El resto de los huecos, que son de reducido tamaño y se corresponden funcionalmente con los dormitorios, siguen también una composición de predominante verticalidad. En las plantas bajas el tratamiento es distinto y se omiten los balcones y las galerías. El plano de fachada no presenta ningún volumen sobresaliente. La orientación de las piezas se mantiene constante en todos los casos.
Funcionalmente las plantas bajas de los bloques recayentes a la C/ Teodoro Llorente se destinan a pequeños comercios. En los bloques recayentes a las calles Jordi de Sant Jordi y Ausiàs March se disponen viviendas en planta baja que cuentan con patio interior, y un total de 300 viviendas de 53 m2.
La tipología desarrollada es de un núcleo de escalera sirviendo a dos viviendas por planta. Las escaleras conservan siempre su orientación a noroeste, situándose respecto al acceso en una posición anterior o posterior.
Las viviendas tipo con dos crujías son pasantes con tres dormitorios, un pequeño comedor, cocina y servicio vinculados a una galería. El mismo comedor sirve de distribuidor y está ausente una clarificadora separación de funciones noche- día, aunque los servicios sí están agrupados. El espacio acusa la compartimentación excesiva en lo que se prevé una ocupación máxima de cinco habitantes por vivienda, en viviendas con una superficie de 53 m2.
La estructura se resuelve con un sistema de pórticos de hormigón armado paralelos a fachada. Las cubiertas son a dos aguas. Las fachadas siguen un principio de repetición del módulo básico que se forma a partir del núcleo de escalera y una vivienda a cada lado por planta. La composición de cada módulo así conformado tiene simetría respecto a un eje central. Las bandas verticales de las galerías y balcones le proporcionan al conjunto una textura peculiar. El resultado tiene esa homogeneidad y contundencia que caracteriza a la mayoría de los barrios de vivienda.
Como ocurre en tantos otros ejemplos de la arquitectura de la posguerra y advertíamos en el caso del grupo L´Uxola de Alcoi que también incorporamos a este Registro, es típica la forma de bloques laminares desarrollando una manzana del ensanche. Su origen podemos encontrarlo en la asimilación de los postulados del Movimiento Moderno que frente a la decimonónica manzana proponían el desarrollo del bloque lineal. En este caso se produce la superposición de una ordenación del siglo XIX con una ejecución muy posterior que atiende a nuevos criterios.
Planos
Otras imágenes
Situación
Referencias
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