Inscríbete y crea tu propia colección de obras y artículos

Urbipedia usa cookies propias para garantizar funcionalidades y de terceros para información y estadísticas.
Si usa Urbipedia, asumimos que las acepta; en otro caso, debería salir de este sitio.

Edificio Bailén Barón

Ir a la navegaciónIr a la búsqueda
Statusbar3.png
    Artículo        Incluir información complementaria        Incluir videos        Incluir artículos relacionados        Incluir Bibliografía         Metadatos    

U.135x135.gris.jpg
Edificio Bailén Barón

En una esquina del centro histórico de Alicante (España) se localiza el edificio de viviendas Bailén-Barón de Finestrat que el arquitecto Miguel López reforma y amplía en 1940.

El volumen construido es el resultado de la combinación o macla de un paralepípedo rectangular y un prisma poligonal, formando este último un amplio mirador. A diferencia de otras soluciones donde la esquina se resuelve con formas de transición más suaves y expresionistas (curvas, achaflanadas, etc.), en este edificio y en el vértice que forman las alineaciones de las dos calles, se perfila con nitidez la arista del paralepípedo.

En los planos laterales de la fachada los huecos puntuales tienen una lectura continua porque se agrupan formando bandas horizontales que se interrumpen en el volumen prismático. En el prisma que sobresale ligeramente se abren unos amplios miradores subrayados con una pequeña moldura en todo su contorno.

Al tratarse de una intervención sobre obra construida, las posibilidades de innovación quedan reducidas. El sistema constructivo original es de muros de carga, que se mantiene, y la elevación posterior se resuelve con pilares en los tramos intermedios que tratan de aligerarlo. La carpintería es de madera y los acabados en fachada lisos, con un revoco de mortero de cemento y pintado.

La planta reformada se concibe con criterios de moderna funcionalidad. Y así, se distinguen los espacios de servicio y servidores: alrededor de un patio de luces alargado que se adosa a una de las medianeras, se agrupan la escalera comunitaria, los servicios, (cocina, baño) y un dormitorio de servicio, mientras que el resto de las estancias se abren a las calles Bailén y Barón de Finestrat. También se advierte cierta zonificación de espacios para el día y la noche, con la sala y el amplio comedor por un lado y los tres dormitorios orientados hacia la otra fachada, en batería.

Compositivamente la edificación parece generarse a partir de un cubo. Y en el alzado no se abandona el recurso a la simetría, en este caso, respecto al eje que coincide con la arista antes mencionada y que pasa por el vértice de la esquina. En realidad, una de las fachadas es más larga, con una solución de huecos proporcional a su mayor longitud. Como herencia clásica, también se distinguen volumétricamente dos cuerpos: la planta baja que se ajusta a las alineaciones y el resto del edificio, en el que sobresalen los miradores volados. En la actualidad, la pintura del paramento exterior, (con dos colores distintos pero no coherentes con la partición descrita), desvirtúa en parte la intención proyectual que en los planos se refleja con un rayado, a modo de despiece, en el cuerpo inferior.

La contundencia volumétrica, y la desornamentación que caracterizan este edificio son rasgos de indudable modernidad. Una modernidad que, aunque más formal y mimética que de sólido fundamento, como bien advierten otros autores, sabe romper con los ropajes del pasado e incluso se impone a las expresiones monumentalistas y casticistas del momento.

Y en este caso como ocurre en tantas construcciones de la época, (no olvidemos que la ejecución del edificio se acomete un año después de acabar la Guerra Civil española), la intención de modernidad, racionalidad y austeridad ornamental, se solapan con la precariedad de medios más absoluta. Se hace difícil determinar entonces dónde empieza "la virtud", (que bajo nuestro punto de vista se identifica con la voluntad moderna), y dónde acaba "la necesidad" o viceversa. Aunque tratándose de Miguel López apostamos por "la necesidad hecha virtud".

En una expresiva perspectiva pintada por Miguel López y que acompaña la documentación conservada, el autor dibuja un coche de la época, evocando los símbolos de una nueva arquitectura y el paradigma de "la casa como máquina de habitar" que Le Corbusier había postulado.

Frente a los rasgos expresionistas cultivados en otras soluciones esta obra representa la tendencia más cubista del autor, también presente en edificios como Plaza de España y Pintor Agrasot.

Planos

LineaBlanca.jpg

Otras imágenes

LineaBlanca.jpg


Situación


Cargando el mapa…
(Círculos de radio 200 m, 1 y 2 km) - Ver coordenadas y enlace con otros sistemas:38°20′41″N 0°29′03″O / 38.344606, -0.484245 - Marcadores de obras: Obras destacadas desde principios S XX  Obras destacadas anteriores al S XX  Otras obras
Ir a Edificio Bailén Barón
Cargando el mapa…
(Círculos de radio 200 m, 1 y 2 km)


Referencias

Ojo.izq.negro.jpg
Referencias e información de imágenes pulsando en ellas.

RACV.png
VV.AA. ( María Dolores Martínez Soto): Registro de Arquitectura del Siglo XX en la Comunidad Valenciana ISBN 84-87233-38-4




Urban-plan.azul.1.jpg

Editores y colaboradores de este artículo ¿?
Alberto Mengual

Artículo procedente de Urbipedia.org. Con licencia Creative Commons CC-BY-NC-SA excepto donde se indica otro tipo de licencia.
Origen o autoría y licencia de imágenes accesible desde PDF, pulsando sobre cada imagen.
https://www.urbipedia.org/w/index.php?title=Edificio_Bailén_Barón&oldid=722730