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Concurso: Centro de Congresos de Alicante (primer premio)
- Lema = SAN CARLOS
- Autores = Juan Pablo Rodríguez Frade (Frade arquitectos, S.L.); Luca Poian Forms Limited; PROINTEC, S.A.U.
Génesis y emplazamiento
La ciudad de Alicante posee un reciente pasado como Plaza Fortificada. Algunos vestigios de su historia son el Castillo de San Fernando al norte y el Castillo de Santa Bárbara al noreste pero, hasta hace menos de 200 años, el sur de la ciudad se encontraba protegido por una tercera fortificación: el Baluarte de San Carlos.
Durante la Guerra de los Nueve Años, Alicante fue asediada y atacada por los buques comandados por el francés Conde D’Estrées. Como consecuencia de la destrucción de buena parte de la ciudad en los bombardeos de julio de 1691, se decide construir el Baluarte de San Carlos sobre una escollera de escombros para defender tanto al municipio como al Arrabal de San Francisco.
Esta construcción militar consistía en un muro a barbeta de unos siete metros de altura, realizado con piedra de la Muntanyeta y coronado por una cornisa. La parte superior formaba una explanada triangular donde se situaban diversas plataformas de madera, la munición apilada, las estancias para los víveres, el pabellón para los soldados, la cisterna para recoger agua, etc.
En 1858 comienza el derribo del sistema defensivo de Alicante y es en el último tercio de este siglo cuando se produce el desmonte de la plataforma. En la actualidad, el espacio que ocupaba esta construcción militar comprende la apertura de la actual avenida Dr. Gadea, la urbanización de una manzana de la calle de San Fernando -Edificio de la Sede Universitaria Ciudad de Alicante- y el parque de Canalejas. Esta área se encuentra a escasos 500 metros de la zona de intervención.
Se propone la creación de un elemento icónico que encuadra la vista desde la Avenida Perfecto Palacio de la Fuente y sirve de referencia en la ciudad de Alicante.
La propuesta se inspira en la tipología del antiguo Baluarte reinterpretado en clave contemporánea: se genera una construcción masiva de muros inclinados que envuelven tres volúmenes macizos. Éstos albergan en su interior los usos más relevantes del nuevo centro: los auditorios. Los espacios interiores intersticiales se abren al exterior a través de huecos ubicados de manera estratégica en fachada para encuadrar vistas claves de este entorno tan singularmente atractivo.
Se genera, por tanto, un diálogo entre la silueta del Castillo de Santa Bárbara, el Castillo de San Fernando y el nuevo Centro de Congresos San Carlos, sirviendo de referencia histórica de la ciudad de Alicante desde una apuesta hacia el futuro.
Estrategia urbana
El paseo marítimo tiene una importancia clave en la ciudad de Alicante, suponiendo una arteria fundamental en el tejido urbano y actuando como foco de actividad constante, tanto turística como local. Éste ofrece zonas de esparcimiento, restauración y paseo. Por otro lado, sirve de acceso a los pantalanes del puerto y al Muelle de Levante en donde se encuentra la terminal de Cruceros. La zona de actuación se encuentra en el extremo izquierdo del Paseo y funciona como cierre a la Dársena Interior protegiendola, junto al Muelle de Levante, del oleaje.
Se plantea un icono arquitectónico en donde la forma y la función aparecen emparejadas desde una interpretación basada en tipologías históricas.
La propuesta tiene como objetivo generar un hito que sirva como remate al paseo marítimo de Alicante y su continuación en la Avenida Perfecto Palacio de la Fuente.
Mediante la reubicación de la actual rotonda del Centro Comercial Panoramix, se logra crear una conexión fluida entre la Avenida Perfecto Palacio de la Fuente y el nuevo Bulevar que discurrirá a lo largo de los muelles 5-7, entre el Edificio 5 del Distrito digital y el nuevo Centro. Asimismo permite conectar ambas vías con el futuro Plan Especial del Puerto, ubicado al sur de la parcela, ofreciendo una rotula de conexión flexible.
La nueva construcción “en puente” de aparcamientos ofrece un jardín público en cubierta que conecta el Centro de Congresos con la torre de oficinas. Éste Jardín genera un nuevo espacio para la ciudadanía desde donde poder disfrutar de vistas tanto hacia el paseo marítimo como hacia el mar de mediodía. El carácter esbelto y libre de fachadas permite una situación de transparencia entre la Dársena Interior y el mar.
El diseño urbano de la propuesta se realiza en consonancia con la arquitectura del proyecto, creando una hilera de arbolado y una acera de dimensiones generosas que recorre la plataforma de los muelles 5-7, estableciendo un recorrido continuo a base de rampas hasta el nuevo jardín.
Propuesta arquitectónica
El Acceso Principal en Planta 00 conduce a un gran Lobby de bienvenida concebido como una gran ágora para la ciudadanía que distribuye la zona pública del Centro de Congresos, abriéndose al mar de poniente a través de un ventanal desde el que se puede acceder a un graderío que se funde con el agua. Este espacio cuenta con los dos elementos principales de circulación vertical: una escalera de caracol que conecta todos los niveles y una escalera lineal que comunica directamente con la Planta 02, en donde se encuentra el acceso secundario al Centro de Congresos. Ambas escaleras cuentan con el apoyo de varios núcleos de ascensores.
La vegetación supone un elemento fundamental en este espacio, proponiéndose grandes jardineras con flora local que permiten controlar la humedad relativa en el interior del edificio. Todo el espacio es iluminado cenitalmente a través de lucernarios con control de rayos UV e IR que ofrecen una iluminación natural, indirecta y tamizada.
La zona privada queda claramente delimitada de la zona pública, con un acceso independiente que conduce al muelle de carga y almacenes, así como un backstage para movimiento de material con acceso directo a todos los auditorios. En esta zona se encuentran los camerinos, zonas VIP y otros espacios para ponentes.
En la Planta 02 se encuentra el acceso secundario al Centro de Congresos. Este conduce a un gran Lobby enfocado especialmente para la sala de exposiciones temporales y otras actividades, incluyendo una cafetería con salida directa al jardin que puede funcionar de manera independiente a la Planta 00. Su acceso se produce a través del Jardín en cubierta que conecta con la torre de oficinas. De esta forma se crea una conexión directa y amable entre ambos volúmenes generándose un espacio público para el ciudadano que puede funcionar en horario diferente al resto del conjunto.
El jardín contará con flora local, creando un corredor verde que protegerá del sol en los meses de verano y permitirá a sus visitantes disfrutar bajo la brisa de una vista panorámica del paseo marítimo y del mar. De esta forma se diferencian los dos accesos: uno destinado a los auditorios y otro más enfocado a exposiciones temporales y otros usos, que garanticen una programación constante y viva del centro.
La torre de oficinas destina las Plantas 00 y 01 para instalaciones y cuenta con un acceso directo a través del Jardín (Planta 02) mediante un Lobby transparente que permite disfrutar del paseo marítimo y del Castillo de Santa Bárbara.
La planta tipo del espacio de oficinas consiste en un espacio abierto a noreste a través de un gran ventanal con una pastilla de apoyo en el suroeste destinada a aulas y cuartos de reuniones. A ambos lados, y funcionando como núcleos estructurales, se encuentran los sistemas de circulación vertical, instalaciones y aseos.
Construcción y sostenibilidad
La propuesta basa su morfología en las grandes fortalezas y baluartes de la ciudad de Alicante. El carácter pétreo y macizo de sus muros les confiere una gran inercia térmica y este ha sido el punto de partida para la concepcion constructiva del proyecto.
Basándonos en experiencias precedentes, el subsuelo existente en el ámbito de actuación portuaria estaría compuesto por rellenos de escolleras de diferentes tamaños. Bajo estas capas se encontraría el fondo primitivo de arenas cuaternarias de origen marino. Será fundamental preparar la base, precargando las zonas de apoyo con el fin de emular las futuras cargas aportadas por las edificaciones y poder conferir a su superficie un módulo de balasto y coeficiente de tensión admisible adecuados. Se plantea una cimentación mediante losa de hormigón armado que será reforzada con pilotes in situ en las zonas donde el edificio aporte menor peso. De esta manera se cubrirían las dos hipótesis de carga y subpresión debido a la oscilación del nivel freático por la marea y una posible crecida periódica de su nivel máximo.
Para la estructura de las edificaciones se prevén tipologías de tipo metálico para la formación de fachadas y pilares, hormigón armado para forjados mediante pre-losas para las grandes distancias y forjados colaborantes para las de menor dimensión. En la cubierta se proyectan vigas de gran luz mediante estructura metálica triangulada.
En cuanto a materiales, nos basamos en la tradición valenciana de cerámica esmaltada para el exterior y otros materiales locales como piedra de la Muntayeta en acabados de suelo.
La estrategia de eficiencia energética a seguir en el proyecto del futuro Centro de Congresos de Alicante se fundamenta en los tres pilares básicos de la sostenibilidad: Economía, Medio Ambiente y Bienestar Social. Para ello se han tenido en cuenta los estándares, principios y normativas de los principales organismos evaluadores en materia de sostenibilidad, medio ambiente y confort de los ocupantes, entre ellos: VERDE Edificios, DNGB, WELL, AIS, LEED y BREEAM. Se han aplicado también Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y el Principio de no causar un perjuicio significativo al medio ambiente – DNSH, de la Taxonomía Europea.
El primer paso sería reducir la demanda energética de los edificios. Para ello se implantarán medidas pasivas que aporten ahorro energético sin que requieran consumo energético: El muro perimetral que envuelve el edificio tiene un grosor de 6 metros, albergando núcleos de circulación, aseos y salas de instalaciones. De esta forma se logra una gran inercia térmica que, apoyada con un acabado de fachada ventilada a través de paneles cerámicos perforados, supone una perfecta solución pasiva y sostenible.
El siguiente paso consiste en incrementar la eficiencia energética de los sistemas del edificio, produciendo la mayor cantidad de confort con el menor consumo energético. En este tipo de edificios el principal gasto energético viene dado por la climatización y la iluminación.
Se propone una climatización mediante la impulsión de aire caliente-frío en las salas, espacios de servicio y oficinas, mientras que para el gran volumen del vestíbulo se implementaría un sistema de suelo radiante calor- frío para potenciar el “Efecto Catedral”.
Aprovechando la proximidad al mar del edificio, se propone un sistema de refrigeración para las bombas de calor hidrónicas, utilizando el agua de mar en un circuito abierto. Esto permitirá un ahorro económico en la instalación ya que no se instalarán torres de refrigeración, y un aprovechamiento energético proveniente del mar. Por otra parte se evitará el gran consumo de agua que tienen los sistemas de bomba de calor agua-agua (bomba de calor hidrónica).
La arquitectura particular de este tipo de edificios, con grandes volúmenes a climatizar, supone un reto para el confort de las personas debido a la estratificación de la temperatura. Para evitar esto, en los espacios de auditorios, se localizarán los sistemas de climatización bajo los asientos.
Ya que el edificio tendrá una gran demanda de energía eléctrica y aprovechando que la
zona de Alicante dispone de una gran cantidad de horas solares al año (más de 3300 h/
año), se hace imprescindible para el ahorro del coste energético del edificio y la reducción
de emisiones de gases de efecto invernadero, la instalación de un campo fotovoltaico
en cubierta para la generación de energía eléctrica. De esta manera, el edificio podrá
autoabastecerse. Además del suministro eléctrico para el consumo normal del edificio,
esta instalación se aprovechará de sistemas secundarios como el de aerotermia, el cual
producirá y acumulará agua caliente sanitaria o mantendrá siempre cargadas las baterías
de los sistemas de emergencia mediante Sistemas de Alimentación Ininterrumpida (SAI).
Estos sitemas darán servicio, en caso de fallo eléctrico, a sistemas críticos del edificio
(comunicaciones, ascensores, instalación contraincendios…etc), con lo que se contribuirá
a almacenar energía producida por la instalación fotovoltaica, que podrá ser aprovechada
según la demanda de estos sistemas. La gran superficie de la cubierta del edificio podría
albergar una instalación de aproximadamente 700 kW de potencia instalada. Esta potencia
estaría cerca de la que demandaría el edificio en régimen de funcionamiento de uso normal.