Cerámica en Interiores

La utilización de la Cerámica en Interiores otorga a los espacios ritmo y carácter doméstico y artesanal. Los elementos realizados con cerámica poseen una atractiva simplicidad que resulta adecuada tanto para ambientes rústicos como contemporáneos.

Tipos de Piezas

Los ladrillos y las baldosas tienen aplicaciones muy diversas. En el caso de las baldosas su resistencia depende de la densidad de la arcilla, el tipo de vidriado (si lo posee) y el grado de cocción. Sólo algunos tipos de ladrillos y baldosas pueden emplearse en espacios exteriores, y algunos productos de cerámica vidriados son sensibles a las manchas. No son buenos conductores del calor: se calientan lentamente y retienen el calor más tiempo que otros materiales.

• Ladrillo
• Baldosa de Cerámica
• Baldosa de Terracota
• Baldosa Hidráulica
• Baldosa sin Vitrificar
• Mosaico o Gresite

Aplicaciones

• Suelos

Para el revestimiento de suelos pueden utilizarse ladrillos, baldosas y mosaicos. En todos los casos se necesitará una base sólida, uniforme y seca para evitar desplazamientos y la penetración de humedad. En ocasiones se requiere una capa hidrófuga entre la base y el mortero sobre el que se asientan los ladrillos. En exteriores se recomienda la colocación de baldosas o ladrillos preparados para tal efecto ya que al ser porosas tienden a absorber la humedad y pueden quebrarse con el frío.

Las baldosas y los ladrillos permiten ser colocados de diferentes maneras, que en el caso de los ladrillos se denominan aparejos.

Es conveniente dejar juntas entre las piezas para absorber posibles dilataciones. Asimismo se preverán juntas de dilatación cubiertas con sellador flexible para el mismo fin.

Las baldosas son recomendables para áreas húmedas y/o de tránsito intenso ( cocinas, baños ). Por lo general las piezas más pequeñas se adaptan mejor a ambientes pequeños. Lo mismo pasa con las grandes, que lucirán mejor en espacios más generosos. Si los diseños son muy complejos convendrá replantear in situ para evitar recortes innecesarios.

• Paredes

Los ladrillos y azulejos brindan a los ambientes un acabado rústico o elegante según las necesidades. Los azulejos permiten ser instalados en las paredes sobre casi cualquier tipo de superficie: pintura, papel, yeso, placas de yeso, etc. Siempre que sean superficies uniformes y estén secas. En zonas húmedas se utilizará cemento cola y mortero refractario donde existan altas temperaturas ( detrás de cocinas, hornos, etc ).

• Superficies de trabajo

Los azulejos no son recomendables en las superficies de trabajo de cocinas o encimeras de los baños, porque con el tiempo tienden a descascarillarse, además de ser dificultosa la limpieza e higiene por la cantidad de juntas que poseen.

Cuidados y Mantenimiento

Tanto ladrillos como azulejos suelen ser de fácil mantenimiento. Aunque los cambios bruscos de temperatura pueden provocar la aparición de grietas y fisuras.

Asimismo los ladrillos o baldosas sin esmaltar pueden ser propensos a las eflorescencias. en algunos casos pueden protegerse con una capa de aceite de linaza o sellador a fin de impregnar los poros del material.

Las baldosas esmaltadas y los azulejos son bastante resistentes a las manchas y los productos químicos. Si la humedad es extrema se puede acumular moho en las juntas; la solución será tratarlo con un fungicida y limpiar con detergente suave y un cepillo rígido.

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