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4 apartamentos en Torredembarra
En los 4 apartamentos en Torredembarra construidos entre 1954 y 1957, Josep Maria Sostres afronta por primera vez el tema de viviendas en grupo. Tal vez por ello hay en esta obra una especial dedicación a la reflexión tipológica.
La idea central era combinar el duplex con la ordenación escalonada en planta, dejando en cada unidad un importante espacio de suelo libre, previendo una zona sombreada y la circulación del aire. El ritmo volumétrico y los efectos de claroscuro, proporcionarían la imagen del conjunto, equilibrando los valores dinámicos y estáticos, vinculando además la arquitectura al paisaje. Esto se haría sin renunciar al uso de paredes medianeras que introducen un importante factor de economía espacial. A su vez el esquema en T de la planta reduce al máximo los espacios circulatorios, al situarse el acceso y la conexión vertical en la intersección de los dos brazos de la vivienda.
Todo ello se expresa en un lenguaje muy sobrio y recogido cuya única excepción es la fachada acristalada a doble altura en el estar. En ella, el despiece de la carpintería y el tratamiento de persianas constituye uno de esos leves ejercicios neoplásticos que aparecen tímida pero insistentemente en la obra de Sostres.
El acceso en coche a los garajes se produce por detrás de la parcela; el acceso peatonal a las viviendas se realiza por el jardín delantero, de tal manera que las dos circulaciones quedan totalmente separadas. Las viviendas se desarrollan en dos plantas, y su estructura es de muros portantes. En la planta baja se encuentra la zona de día y en la superior los dormitorios. Uno de los lados de la T de la planta superior se apoya sobre la casa vecina, dejando un porche en la planta baja que permite ver el jardín a través de la casa. En la sala de estar se crea un doble espacio que da al dormitorio principal, se abre al exterior por medio de una ventana a doble altura.
El color constituye un elemento muy importante del proyecto; el blanco unitario mediterráneo es el color dominante, puntuado con ligeras notas de color para hacer visibles los elementos arquitectónicos, especialmente las carpinterías, que están compuestas de forma neoplástica y se han pintado de colores primarios, como los que utilizaba Johannes Pieter Oud en Holanda: las persianas de las casas de Torredembarra son amarillas y las carpinterías azules. La decoración se reserva a la naturaleza y al mobiliario.
Planos
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Situación
Referencias
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