Casa Rogers
La Casa Rogers, encargada por los padres de Richard Rogers y construida entre 1968 y 1969, se ubica en una parcela urbana larga y estrecha situada frente a Wimbledon Common, al suroeste de Londres, y junto a una importante carretera.
Está diseñada para ofrecer la máxima privacidad y aislamiento, y se compone de dos elementos separados que dan a un patio interior ajardinado. La unidad más pequeña acoge el estudio de cerámica y funciona como barrera acústica entre la casa y la carretera. Rogers describe la casa como «un tubo transparente con sólidos muros divisorios».
La estructura de acero se incluye bajo la superficie para eliminar el mantenimiento y simplificar las uniones entre esta y la estructura. Ocho portales rígidos soldados fabricados con secciones estándares de acero permiten desmontar el conjunto y reutilizar tanto la envolvente externa como las particiones internas. Los muros son paneles compuestos de capas internas de aluminio recubierto de plástico con un núcleo de espuma plástica y un sistema de uniones de neopreno. La flexibilidad tiene mucha importancia, por lo que la mayoría de las divisiones internas son móviles. Se utilizan unidades selladas de gran tamaño y doble acristalado montadas en marcos de acero pintado y techos acristalados que reflejan el sol, unidos con neopreno, para delimitar los baños.
Planos
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