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Hanequin de Bruselas
Puerta de Los Leones de la catedral de Toledo
Hanequin de Bruselas (p. s. XV – 1475) fue un arquitecto y escultor de origen flamenco activo en Castilla en los años centrales y segunda mitad del siglo XV. Documentado en Toledo desde 1448, como maestro mayor de las obras de la Catedral, probablemente se estableciera en la ciudad desde comienzos de la década de 1440, puesto que en la fecha de su primera referencia documental se refiere que dio termino al cuerpo superior y remate de la torre que había iniciado en 1424 el maestro Alvar García. Una de las torres principales de los templos góticos españoles, la parte llevada a cabo por este maestro destaca por ser una de las que más tempranamente se realizaran en estilo gótico flamígero, que Hannequin introdujo en el foco toledano. La presencia de las características de este estilo en la parte superior de este estilo en la parte superior de los paramentos de la capilla del condestable, Álvaro de Luna. Probablemente intervino, al servicio del condestable Álvaro de Luna, en las obras del Castillo de Escalona.
Entre 1452 y 1465, dirigió las obras de la portada de los Leones en la catedral, en la que trabajaron un equipo de artistas españoles y extranjeros, entre los que se contaban dos hermanos de Hannequin, llamados Egas Cueman y Antonio Martínez de Bruselas, y los escultores Juan Aleman, Pedro Guas y su hijo Juan, cuya intervención se documenta entre 1453 y 1454.
La monumentalidad con que esta concebida esta portada se acrece con las labores escultóricas y decorativas; es uno de los principales conjuntos de escultura y arquitectura gótica de raigambre flamenca, con los que cuenta la Catedral. En 1454, contacto de nuevo junto con su hermano Egas, la ejecución de la sillería del coro de la Catedral de Cuenca, actualmente conservada en la Colegiata de Belmonte (Cuenca), y hacia 1460, se encargo de las obras de la girola que alterno con el correspondiente al cargo que ocupaba en la de Toledo, en el que permaneció en 1470. A mediados de la década de 1460, decoro la capilla sepulcral de Pedro Giron, en el convento de Calatrava la Nueva, en Ciudad Real, con un túmulo funerario realizado a imitación de los borgoñones, particularmente el de Felipe el Atrevido.
Fallecido en 1472 y 1475, su labor artística en Toledo quedo consolidada por el grupo de arquitectos y escultores que asumieron y consolidaron el estilo que Hannequin introdujo, destacan su cuñado Alonso, su hijo Martin, Juan Guas y Enrique Egas, activos hasta finales del primer tercio del siglo XIII.
Referencias
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